8 mar 2011

Gilipollas

Al fin ya estoy en casa.
En el hospital he tenido tiempo mas que suficiente para pensar.
Para pensar en cómo sacar de mi vida a un Gilipollas.
Y lo primero que he hecho ha sido coger la única foto que guardaba
de este indeseable y borrar para siempre sus ojos;
esos ojos en los que tantas veces me miré y en los que creí ver las estrellas.
Me he hecho un poster y lo he puesto frente  a mi cama, para que cada día  al despertar
lo primero que vea sea su cara de idiota.
Ya no voy a llorar mas por él.
¡Se acabó!

1 comentario:

  1. Hay veces que un hombre tiene que dejar de ser un hombre para evitar dañar a la mujer que quiere, por muy duro y dificil que sea de entender.
    Me alegro de que te hayas recuperado.


    Este gilipollas te manda un abrazo sincero.

    ResponderEliminar